Un sicario identificado como Cabo 33, miembro del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), envió un terrible mensaje a sus grupos rivales en Tijuana, Baja California, junto a un ejecutado.
El pasado 11 de febrero, René Arzate García, alias La Rana, miembro del Cártel de Sinaloa, dejó un cadáver en una hielera junto a un comunicado para el CJNG en la ciudad bajacaliforniana, en el que mencionó que haría una limpia:
Seguimos y seguiremos aciendo limpia de ratas y corrientes jalicienses y cafeteras y todo aquel que ande haciendo males a gente inocente. Atte: El Diablo Verde, más fuerte que nunca” [sic]
Tal parece que la guerra entre el CDS y el CJNG no tiene para cuándo terminar, pues el pasado 14 de febrero, a través de Twitter se reportó la ejecución de un masculino no identificado en la colonia 3 de Octubre, perteneciente a la delegación Los Pinos.
Según el reporte, el hombre fue brutalmente baleado a las 18:50 horas; sin embargo, no fue el único, pues estaba acompañado por otro sujeto que solo resultó herido en la refriega.
Aunque en el tuit se menciona que los homicidas dejaron una cartulina con un narcomensaje del Cabo 33 al lado del cadáver, hasta el momento se desconoce el contenido.
De acuerdo con Zeta, desde 2015, Los Cabos, como se hacen llamar miembros del CJNG, han emprendido una pugna con grupos rivales, particularmente con el Cártel de Sinaloa, por el control en la venta y distribución de droga en la ciudad.
Esto se ha traducido en numerosas ejecuciones, incluso algunas en las que han resultado muertos menores como en mayo de 2017, cuando un niño y una niña fallecieron en ataques perpetrados por el CDS en contra de miembros del CJNG, padres de los pequeños.
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