Joaquín Guzmán Loera, alias El Chapo, habría contado con la protección de los gobiernos de Vicente Fox Quesada y Felipe Calderón Hinojosa para consolidar el poderío del Cártel de Sinaloa.
En 2001, a 60 días de que Vicente Fox asumiera la Presidencia, se llevó a cabo la primera fuga de El Chapo del penal de Puente Grande, en Jalisco, tras siete años de estar tras las rejas.
Aunque no hay evidencia de investigación en las instancias de seguridad y de inteligencia del Gobierno Federal, sí hubo detenidos y consignados por ese hecho.
El 12 de julio de 2015, El Chapo se convirtió en el hombre más buscado del planeta tras escapar del penal de máxima seguridad del Altiplano, hasta su recaptura en enero de 2016.
A mediados de noviembre de 2018, Jeffrey Lichtman, abogado de El Chapo, aseguró que el Cártel de Sinaloa pagó millones de dólares en sobornos a Peña Nieto, y a sus antecesores Calderón y Fox.
A través de Twitter, Felipe Calderón negó las acusaciones hechas en su contra y señaló:
Son absolutamente falsas y temerarias las afirmaciones que se dice realizó el abogado de Joaquín El Chapo Guzmán. Ni él, ni el Cártel de Sinaloa, ni ningún otro realizó pagos a mi persona”
Eduardo Sánchez, vocero de la administración de Peña Nieto, recordó que el gobierno de este fue el que capturó y extraditó a Estados Unidos al narcotraficante:
El gobierno de Enrique Peña Nieto persiguió, capturó y extraditó al criminal Joaquín Guzmán Loera. Las afirmaciones atribuidas a su abogado son completamente falsas y difamatorias”
Durante el programa Conclusiones de CNN, el expresidente Vicente Fox aseguró que nunca tuvo un ofrecimiento de acuerdos o pagos de parte de narcotraficantes; además, afirmó que de cualquier manera no lo habría aceptado.
Sin embargo, desde marzo de 2016, Andrés Manuel López Obrador había enfatizado en la importancia de que El Chapo declarara sobre quiénes le brindaban protección, quién lo ayudó cuando se fugó del Altiplano y qué acuerdos tenía con Peña Nieto, así como con los expresidentes Vicente Fox y Felipe Calderón.
Varios medios señalaron que, a lo largo de los sexenios de Fox y Calderón, El Chapo pudo operar con la complicidad del Gobierno, según declararon los mismos miembros de su cártel. Esto explicaría por qué los numerosos operativos implementados para su captura fueron infructuosos.
Durante una entrevista para el periódico británico The Guardian, Rosa Isela Guzmán Ortiz, hija del capo sinaloense, señaló que El Chapo fue traicionado por el Gobierno:
El Gobierno rompió su promesa. Era un pacto que no respetaron. Ahora que lo capturan dicen que es un criminal, un asesino, pero no dicen nada cuando se les pregunta por el dinero para sus campañas. ¡Son unos hipócritas!”
La fuga de El Chapo del Altiplano, a través de un túnel kilométrico cavado debajo de su celda, dejó en ridículo al gobierno de Peña Nieto y a su secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong. Aunque no ofreció pruebas que confirmaran sus declaraciones, Guzmán Ortiz aseguró que funcionarios de muy alto nivel ya habían dado luz verde para la huida.
Las declaraciones de Marcelo Peña García, cuñado de El Chapo, quien se convertiría en testigo protegido de la Procuraduría General de la República (PGR), donde fue nombrado como Julio, revelarían que tanto en las fugas como el tiempo que estuvo prófugo de la justicia recibió ayuda de altos funcionarios.
Además, Peña García afirmó que El Chapo contó con el respaldo de grandes capos de la droga, como Héctor El Güero Palma e Ismael El Mayo Zambada, pues en el tiempo que estuvo escondido recibió llamadas en la que se le advertía sobre los operativos de la PGR para dar con su paradero:
El Gobierno Federal tenía que simular que le estaba dando golpes al capo”
El Chapo fue extraditado en enero de 2017 y en febrero de este año, después de tres meses de juicio, 56 testigos, un gran número de fotografías, grabaciones y mensajes de texto interceptados, el jurado neoyorkino lo encontró culpable de todos los cargos que se le imputaron.
A sus 61 años, tras tres detenciones y dos fugas de cárceles de máxima seguridad, tal parece que el narcotraficante morirá en prisión.
Sin embargo, medios nacionales e internacioanles han señalado que es importante prestar atención a los cabos sueltos que dejó el juicio, uno de los más importantes está relacionado con los sobornos millonarios que El Chapo habría pagado a expresidentes mexicanos.
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