Sin el apoyo de personal de alguna otra dependencia, la Secretaría de Marina registra 407 enfrentamientos directos con grupos de la delincuencia organizada que le han permitido abatir a 670 integrantes de los cárteles del narcotráfico.
Desde el sexenio pasado hasta hoy, el grupo de Fuerzas Especiales de la Marina tiene la encomienda de localizar a los generadores de la violencia, misión que le ha permitido capturar y neutralizar a los personajes más importantes de distintas organizaciones criminales que asuelan diversas regiones del país.
La institución naval también coordina operativos que se realizan en el norte de la República de manera conjunta con el Ejército, la Policía Federal, la Procuraduría General de la República y ofrece apoyo a las procuradurías y fiscalías estatales.
Documentos de la Secretaría de Marina revelan que desde 2006 a la fecha, cuando se declaró la guerra contra el narcotráfico, 670 delincuentes murieron en los 407 enfrentamientos directos, que dejaron 43 heridos y 102 detenidos, civiles que pertenecen a grupos delictivos.
Durante 2010, 2011 y 2017 falleció el mayor número de civiles relacionados con el crimen organizado solo en confrontaciones con la Marina; en el primero de los años mencionados fueron 109; en 2011, 124, y el año pasado, 108.
Tamaulipas es la entidad donde más enfrentamientos ha vivido el personal naval, ya que en los últimos 11 años se suscitaron 53 contra las células de los cárteles del Golfo y Los Zetas.
En 2010, por ejemplo, en el municipio tamaulipeco de Matamoros, la Marina abatió al líder del cártel del Golfo, Ezequiel Cárdenas Guillén, Tony Tormenta, hermano del capo Osiel Cárdenas, El Mataamigos.
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