Era 19 de febrero de 1945, más de 900 soldados fueron devorados por cocodrilos, en la Isla Ramree, Birmania.
El hecho se dio durante la Segunda Guerra Mundial, dentro de la Batalla de la Isla Ramree, la cual duró casi dos meses. El ejercito aliado se disponía a recuperar el territorio, que pertenecía a Japóndesde el año 1942. Este punto era clave por su localización, ideal para la construcción de basesaéreas.
Tras varias semanas de batalla en la zona costera, los soldados británicos consiguieron desembarcar en Ramree, justo en la noche del 19 de febrero, hace 72 años, lo que obligó a las tropas japonesas a retroceder hacia el interior de la isla.
Una zona pantanosa, oscura y llena de manglares, donde habitaban hambrientos cocodrilos de aguasalada, los cuales acabaron con casi todos los soldados japoneses, y además dejaron los restos para los buitres que se acercaron a la mañana siguiente. De mil elementos, solo fueron encontrados 20 con vida.
Aunque algunos creen que es una leyenda, desde ese día la isla de Ramree es considerada como un lugar maldito, pese a que la caza furtiva ha acabado con casi todos los cocodrilos para hacer de esta forma tan cruel bolsos de lujo.
El hecho quedó registrado en el Libro Guinnes de los Récords como “El mayor desastre causado por animales en toda la historia”.
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