Keysi Johana González Corrales fue detenida en 2013 por ser la supuesta proxeneta de Los Zetas. Aunque los cargos fueron retirados meses después, hasta el momento es conocida como la Madame Yucateca.
En 2011, Keisy González estuvo en el centro de la atención pública debido a que se liberó una orden de aprehensión en su contra por presuntamente ofrecer servicios sexuales de modelos entre integrantes del crimen organizado como Los Zetas, así como prominentes empresarios y políticos.
Desde 2008, las autoridades vincularon a Keysi con una red de prostitución, que manejaba un catálogo de mujeres en internet.
Aunque estuvo prófuga de la justicia por dos años, la costarricense fue detenida y procesada por los delitos de lenocinio, privación ilegal de la libertad de dos jóvenes extranjeras y trata de personas.
Sin embargo, su estancia en prisión fue corta, pues la sentencia de diez años fue invalidada luego de que su defensa promoviera un amparo ante un tribunal federal para que la Madame Yucateca fuera absuelta de los delitos y saliera de prisión.
En mayo de 2014, Keysi González recuperó su libertad, junto con otros dos acusados por el mismo delito, y su abogado confirmó que no tenía pendiente ningún tipo de proceso penal por prostitución en nuestro país.
En aquel momento, la costarricense señaló que todas las acusaciones estuvieron relacionadas con las diferencias personales que tenían el delegado de Migración, Hernán Vega Burgos, y Rafael Acosta Solís, entonces subprocurador del estado.
Después de ser relacionada con Los Zetas, la costarricense decidió quedarse en Mérida, Yucatán, con su familia, donde residió con tranquilidad hasta hace unas semanas, cuando su arrendatario, Jorge Briceño, interpuso una demanda civil en su contra por el adeudo de seis meses de alquiler.
El presunto afectado reportó la presencia y las actividades de Keysi González al Instituto Nacional de Migración (INM) y la Procuraduría General de la República (PGR) debido a que presuntamente está operando una red de prostitución en la casa en disputa, aunque de menores dimensiones que la que manejaba en el pasado.
El abogado de la demandada señaló que las acusaciones son absurdas, pues si la costarricense se dedicara a la trata de personas no tendría ningún problema en pagar la renta mensual del predio que habita.
Además, criticó a la prensa por referirse a su cliente como la Madame Yucateca, pues en 2014 quedó comprobado que no se dedica a ninguna actividad relacionada con la prostitución, y señaló que Kaisy González decidió reservarse los motivos por los que tiene un desacuerdo con su casero.
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